Como puede el JIFE apoyar para una prevención más efectiva?
La JIFE está monitoreando la implementación de las convenciones. Nuestro papel no solo se centra en la aplicación de la ley. Monitoreamos y aconsejamos a las agencias, y cuando consideramos que hay una ruptura con las convenciones, tenemos que ejercer nuestro mandato. Sin embargo, no es la JIFE quien interpreta las convenciones. Las ONG nos ayudan a comprender los mejores enfoques. Los gobiernos de Kazachstan, viven en medio de actitudes culturales muy difíciles.
La JIFE se pronunció sobre la pena de muerte, y el derecho de los seres humanos de no ser sometidas a ella. Buscará el JIFE aplicar otros derechos humanos, como la reducción de daños?
Las convenciones no contienen ni definen el término reducción de daños. Defienden el derecho a la salud, no a la reducción de daños. El artículo 38 de la Convención de 1971, se refiere a la obligación del estado de proveer integración social, tratamiento y rehabilitación . Ningún país tiene la obligación de aplicar medidas de reducción de daños. Esto es muy ideológico.
Los países son libres de considerar que medidas de prevención van a utilizar. Tratamiento, educación e integración social.
Los gobiernos pueden elegir ejecutar medidas de aplicación de la ley ,
pues las convenciones permiten a los países aplicar medidas estrictas
penales. Nosotros alentamos a los estados a que consideren a los
usuarios de drogas como seres humanos.
Hay una tendencia en los países de la Unión Europea – no en los gobiernos, pero sí en las ONG, – de que no deberíamos reducir la demanda, sino que deberíamos legalizar las sustancias e implementar programas de reducción de daños.
La consideración de algunos países de distribuir heroína para fines médicos está en línea con las convenciones, siempre y cuando la administración de la sustancia este bajo control médico. La disponibilidad de metadona y buemorfina para uso médico está también en línea con las convenciones, pero no es un requisito de las mismas.
Acceso a medicinas esenciales
Se ha establecido un mecanismo por parte de la JIFE para monitorear la producción, manufactura y consumo de drogas. En cierto sentido, las convenciones han legalizado las drogas, pero para usos médicos y científicos. La JIFE está regulando el uso de drogas alrededor del mundo alrededor de las estimaciones que los estados miembros hacen de sus necesidades.
Los estados pueden presentar, cada tres meses, estimaciones de drogas para uso médico y anualmente han de reportar sus necesidades estimadas. Si un país no presenta un análisis de sus estimaciones de – por ejemplo – morfina necesaria, ese país no podrá importar morfina este año. Si vemos que la etimación anual es muy baja, JIFE recomendará hacer una re-estimación. La JIFE puede recomendar, pero no puede ejecutar sobre los países.
La OMS produjo hace unos años unos principios guía para que los países puedan reportar sus necesidades anuales. Fuimos invitados por la cumbre mundial sobre cancer el año pasado…
Pueden clarificar la posición de la JIFE sobre la aplicación de los centros de tratamiento obligatorio? En su informe anual, la JIFE critica esta práctica en algunos países mientras que la apoya en otros.
Desde la JIFE tenemos que lidiar con los diferentes aspectos culturales de los países.
La JIFE apoya esta práctica siempre y cuando esté en línea con las convenciones.
En Camboya, el gobierno debería promover tratamiento comunitario, en vez de el tratamiento obligatorio que existe en la actualidad. Cuando existe la posibilidad en el país de que las autoridades gubernamentales se comprometan con las ONG para proveer tratamiento en entornos comunitarios y sobre el acuerdo voluntario con los usuarios de drogas, la JIFE alentará a los países a hacer lo propio. Esto sucede en Kazajistán, donde podría estar dándose un desarrollo positivo por parte de las
autoridades de apoyar a las ONG en el tratamiento comunitario. Sin embargo, cuando no existe esta posibilidad, la JIFE no se encuentra en una posición en la que pueda obligar a los países a ofrecer tratamiento voluntario y comunitario.
Palabras finales
Toda la comunidad internacional de control de drogas es consciente de la importancia del trabajo de los gobiernos. Sin embargo, también el trabajo de las ONG en prevención es esencial.