Un gobierno de unidad nacional ha alineado por primera vez sus operaciones antinarcóticos con las operaciones militares antiinsurgencia. Nuestros primeros objetivos serán la reducción del opio.
La reducción de la demanda de la droga se reducirá por primera vez en Afganistan. El ministerio contranarcóticos ha iniciado un programa para llegar a los distintos enfoques de la economía del opio, incluyendo el consumo.
La economía del opio está en aumento y hemos entrado en un juego de culpabilización política que socaban los resultados políticas. La economía del opio es un problema, pero mayor problema son los enfoques utilizados para combatirla. Conocemos nuestros problemas y nuestras soluciones, ahora corresponde a la comunidad internacional contribuir.
Las intervenciones en Afganistan están altamente dominadas por la aplicación de la ley, hemos de incluir programas de desarrollo alternativo y programas basados sobre el terreno. Propongo un hito para anunciar una década para la eliminación de la economía del opio. Afganistán por si sola no podrá dominar la economía del opio.
Los grupos terroristas y separatistas, el blanqueo de capitales, pueden poner en jaque la seguridad y la gobernanza en la región. Afganistan esta decidido a la eliminación de la economía del opio. Necesitamos una responsabilidad compartida.