Hay nuevos retos, algunos persistentes, otros novedosos, así como nuevos patrones y tendencias. Hemos de responder a los problemas serios a los que nos enfrentamos, en concreto el tráfico de drogas y su vinculación con trata de personas, blanqueo de dinero, financiamiento del terrorismo y el aumento de la corrupción. Hemos de garantizar soberanía, principio de no intervención en los asuntos internos de los estados, así como los derechos humanos.
La UNGASS 2016 es un hito camino a 2019.
El desarrollo alternativo es una opción viable, sostenible e importante y deberia aplicarse como una parte integral de las políticas.
Nos preocupa la gran cantidad de químicos y precursores no fiscalizados, incluido el tráfico de ketamina y su tráfico ilícito. Hacemos un llamado para que se tomen medidas para una fiscalización apropiada, teniendo en cuenta la disponibilidad para usos médicos. Saludamos la creación de un grupo trabajo de expertos de la OMS sobre drogas que se reuniera en Julio de 2014, y agradecemos sus recomendaciones, pero más recomendaciones y aspectos legales y administrativos han de ser tenidos en cuenta.